Publicar que un 15.6% de nacidos entre 2010 y 2017 en la República Dominicana son hijos de padres haitianos es un dato que merece ser analizado profundamente, debido a la gran responsabilidad que representa para el país, tanto en ámbito social como económico.
La inversión promedio de cada parto vaginal oscila entre 8 mil 200 pesos, y si es con cesárea promedia los 16 mil 700 pesos. El estudio calcula que la inversión aproximada de casi 349 millones para los partos de extranjeras entre 2013 y 2016.
Si nuestras autoridades no buscan una solución inmediata al problema estos datos irán aumentado año tras año.
Solo basta observar como de manera maliciosa las mujeres del vecino país se trasladan a los hospitales del país para dar a luz a sus criaturas, de alguna manera habrá complicidad para que esos datos se sitúen en la escala que aparecen en un reportaje de un diario local.
Demasiados problemas enfrentamos los dominicanos con el déficit que encontró en los hospitales el director ejecutivo del Servicio Nacional de Salud en los hospitales.
Hacemos un llamado al SNS para que de una manera u otra busque mecanismos para reducir el alto índice de partos de extranjeras en el pais.