El Colegio Médico Dominicano (CMD) anunció este miércoles un paro nacional de 72 horas en todos los hospitales públicos, subcentros y unidades de atención primaria, como medida que refleja su inconformidad ante la falta de avances en las negociaciones sostenidas con el gobierno.
El llamado a paro se realizará del martes 12 al jueves 14 de noviembre, asegurando que se mantendrán las emergencias y la atención a pacientes en estado crítico.
Desde el 11 de enero, el CMD ha mantenido un diálogo con el Presidente Luis Abinader, la Vicepresidenta Raquel Peña y el Gabinete de Salud, durante el cual se llevaron a cabo ocho reuniones, de las cuales el mandatario participó en cuatro. En estos encuentros, los representantes del CMD presentaron varias demandas, que consideran fundamentales para mejorar las condiciones laborales y de salud en el país.
Entre las principales exigencias se encuentran: la mejoría en la infraestructura hospitalaria y la seguridad sanitaria, un aumento salarial del 70% para los médicos de distintos sectores, una reducción del aporte al seguro médico de los médicos pensionados, y el aumento de incentivos para intensivistas y emergenciólogos. Además, solicitan la implementación de un bono anual, mayor apoyo al Instituto de Previsión y Protección Social del Médico (IPPS) y el fin de las cancelaciones de profesionales de la salud, con la reposición de aquellos afectados.
A pesar de algunos avances en incentivos por antigüedad y nivelación salarial para médicos vinculados a la pandemia de COVID-19, el CMD expresó que no ha habido cumplimiento en sus demandas esenciales. La falta de respuestas y la ausencia de nuevas reuniones con el presidente en los últimos cuatro meses ha llevado al gremio a considerar rota la comunicación con el gobierno.
«Nos mantenemos abiertos al diálogo y a la concertación,» expresó la Junta Directiva Nacional del CMD. «Sin embargo, de no recibir respuestas concretas, estamos preparados para continuar con acciones más contundentes.»
El gremio medico reitera su compromiso de seguir defendiendo los derechos de sus miembros y la calidad del sistema de salud, mientras se mantenga la disposición al diálogo con las autoridades en búsqueda de una solución.
Por: Cristina Piantini