Hemos planteado en varias ocasiones, que el Sistema Nacional de la Seguridad Social es miope, No es humano ni equitativo, pues no se entiende que en plena pandemia, no se proteja bajo la Ley 87-01 al binomio más importante del sistema, como lo es el médico y el paciente.
A este último, le corresponde mantener financieramente al sistema de seguridad social mediante el pago de la capita y así pasa en el régimen subsidiado y el contributivo, generando, como hemos dicho un monto mensual sobre los 5,000 millones de pesos, sin contar los planes complementarios, por los cuales reciben también beneficios las ARS.
En este momento de calamidad sanitaria, donde tanto los médicos como los pacientes, que son los que sostienen el sistema de seguridad social, deben recibir la ayuda de un sistema que sólo ha empujado por el lado de los que más tienen. Llegó la hora de responder a los médicos, dándoles el bono o el incentivo solidario sin descontar en cuotas, incluso a los médicos que ya les mandaron o depositaron dinero. Y los pacientes, que son también los actores principales, deben estar exentos de copago, al aumentar las consultas ambulatorias a los médicos.
De no ser así, las ARSs, deben retornar la suma o el monto no usado por los pacientes y los médicos la Tesorería Nacional de la Seguridad Social, en caso de no poder justificar los gastos ni la entrega de los incentivos a los médicos.
Por: Dr. Santos Ramírez Uribe.