Desde su lanzamiento en 2004, es un día dedicado especialmente para crear conciencia y este año su campaña es «Las pequeñas cosas construyen confianza» (Small Things Build Confidence) e invita a todas las personas a hacer algo pequeño para apoyar a la gente que viven con linfoma compartiendo un mensaje en las redes sociales con el hashtag #WLAD2019 ayudando a que crezca el árbol internacional de la confianza.
¿Qués es el Linfoma?
Es un tipo de cáncer del sistema linfático, el cual forma parte del sistema inmunitario del organismo, ayudando a protegernos de bacterias, virus y sustancias no deseadas.
La mayor parte del tiempo, no somos conscientes del funcionamiento interno del sistema linfático a menos que los ganglios linfáticos se nos inflamen y aumenten de tamaño. Esto suele ocurrir durante las enfermedades y es un indicador de que el sistema linfático está trabajando para filtrar las sustancias nocivas y expulsarlas del cuerpo.
Existen muchos tipos de linfoma, un tipo se denomina enfermedad de Hodgkin, el resto se conoce como linfoma no Hodgkin.
Los linfomas de Hodgkin comienzan cuando un tipo de glóbulos blancos, llamado células T o células B, se hacen anormales, las células se dividen una y otra vez aumentando el número de células anormales. Las células anormales pueden diseminarse a casi todas las demás partes del cuerpo.
Las causas exactas del linfoma no Hodgkin todavía no están claras. El linfoma no es contagioso, pero se han identificado algunos factores de riesgo, como:
Tener afecciones que debilitan el sistema inmunitario, como el SIDA (síndrome de inmunodeficiencia adquirida).
Tomar medicamentos depresores del sistema inmunitario tras un trasplante de órganos.
Exponerse a determinados virus, como el virus Epstein-Barr (que suele provocar mononucleosis), el virus de la hepatitis C y otros.
Helicobacter pylori (H. pylori): Bacterias que pueden causar úlceras estomacales. Dichas bacterias aumentan también el riesgo de linfoma en el revestimiento del estómago.
Tener un hermano afectado por la enfermedad.
Aunque el linfoma no Hodgkin se puede presentar en personas jóvenes, la posibilidad de padecer dicha enfermedad aumenta con la edad, la mayoría de las personas con linfoma no Hodgkin tienen más de 60 años de edad.
Los síntomas mas frecuentes son:
Ganglios linfáticos inflamados, sin dolor, en cuello, axilas o ingle.
Pérdida de peso inexplicable.
Fiebre.
Sudoración nocturna profusa.
Tos, dificultad para respirar o dolor torácico.
Debilidad y cansancio que no desaparece.
Dolor, inflamación o sensación de hinchazón abdominal.
Siempre consulte a su médico de cabecera para un correcto diagnóstico y tratamiento.